Nadie disfruta viendo su propia sangre, pero a veces no se puede evitar, y lamentablemente el proceso del tatuaje es una de estas situaciones, ya que los tatuajes sangrantes no se pueden evitar. También es cierto que algunos tatuajes pueden sangrar mucho más que otros.
Sigue leyendo para descubrir las verdades del sangrado de los tatuajes y qué hacer si sangras más que la persona promedio mientras te tatúan.
¿Todos tus nuevos tatuajes sangran y durante cuánto tiempo sangran?
Definitivamente habrá sangre, pero cuánta sangre depende de algunos factores. Esto también se aplica a cuánto tiempo se sangra después de que el tatuaje ya ha sido terminado.
Por lo general, tu tatuaje continuará echando una mezcla de sangre, tinta y plasma entre 12-36 horas (24 horas de media) después de que el tatuaje se haya completado. Después de este período de tiempo, tu piel comenzará a cicatrizar lo suficiente como para que el proceso de formación de costras pueda frenar eficazmente las fugas.
Tu tatuaje puede sangrar más si, por ejemplo, consumes alcohol o tomas calmantes/Ibuprofeno tras hacértelo, ya que estos productos generan efectos que licuan la sangre.
Estos efectos no solo permitirán que se filtre más sangre por los pequeños orificios que la aguja realiza durante el tatuaje, sino que también pueden evitar que se formen coágulos/costras con la misma eficacia, lo cual significa que tu tatuaje puede demorarse a fin de detener el sangrado.
Lo mismo también es cierto si se toman medicamentos anticoagulantes con receta.
También debes recordar que todo el mundo es diferente, y que algunas personas sangrarán más o menos según la composición de su genética y sangre.
Estar tatuado en ciertas partes del cuerpo también puede causar más sangrado dependiendo de la tensión arterial en cada área en concreto.
Un ejemplo de esto son los hombros. Me han tatuado los dos hombros y, por la razón que sea, sangraron mucho más que el resto de mis brazos (aunque esto no resultó ser un problema y todo salió bien).
No obstante, todo el mundo es diferente por lo que en algunas personas los tatuajes en el hombro pueden no causar apenas sangre en comparación conmigo.
Qué hacer si un nuevo tatuaje no deja de sangrar
Hemos establecido que todo el mundo sangrará durante un tatuaje, y continuará sangrando durante un tiempo, pero ¿qué ocurre si por alguna razón tu tatuaje sangra durante más tiempo de lo que debería hacerlo?
No te preocupes si ves algo así: la acumulación de sangre debajo de la venda es normal.
Antes de nada, no entres en pánico. Algunas personas continuarán filtrando pequeñas cantidades de sangre y plasma durante más tiempo de las 36 horas indicadas al comienzo de este artículo. Sin embargo, si después de 48 horas tu tatuaje aún sangra, puede haber un par de razones tras ello.
Como se ha mencionado anteriormente, varios productos y medicamentos pueden evitar que la sangre se coagule. Si continúas tomando alcohol, analgésicos/Ibuprofeno o anticoagulantes inmediatamente después de hacerte un tatuaje, hay posibilidades de que estos medicamente interfieran en el proceso de cicatrización del tatuaje.
Recuerda: si tomas algún tipo de medicamento anticoagulante con fines médicos, es muy importante que consultes a un médico antes de decidir dejar de tomarlos para hacerte un nuevo tatuaje.
Otra razón para el sangrado continuo del tatuaje son los niveles de actividad después de que se te aplicas la tinta.
Si terminas tu tatuaje y luego te lanzas directamente a realizar ejercicio intenso, esto puede interrumpir el proceso de cicatrización natural del cuerpo, lo cual a su vez puede hacer que tu cuerpo tarde un poco más en completar la coagulación y las costras de tu tatuaje.
Por último, la razón principal por la cual tu tatuaje puede tardar más en detener el sangrado es una infección.
Aunque las infecciones de los tatuajes no son muy habituales a día de hoy gracias a entornos esterilizados y a más pormenorizadas instrucciones sobre cuidados del tatuaje ofrecidas a los clientes, todavía hay que tener cuidado y asegurarse de que el nuevo tatuaje permanece limpio y sin bacterias durante los estados de cicatrización iniciales.
Un tatuaje infectado
Las infecciones de los tatuajes pueden presentarse de muchas maneras, y uno de los síntomas puede ser un sangrado/supuración/líquido excesivo en el área de la herida.
Si sospechas que tu tatuaje puede estar infectado, consulta a un médico lo antes posible, ya que algunos tatuajes pueden volverse extremadamente desagradables si no se tratan.
Mi tatuaje sangra tinta, ¿es normal?
Esto es completamente normal. Un buen artista siempre pondrá la mayor cantidad posible de tinta en la zona para asegurarse de que la mayor parte de la tinta permanezca en su lugar dentro de la piel.
Sin embargo, la mayoría de las veces, se ha insertado más tinta de la que tu cuerpo/piel es capaz de gestionar, por lo que parte de esa tinta se expulsa junto con el sangrado inicial del tatuaje. De nuevo, esto es normal.
Si bien puede parecer preocupante que tu nuevo tatuaje esté sangrando tinta mientras se supone que está cicatrizando, en la mayoría de los casos no hay nada de qué preocuparse.
¿Te acabas de hacer un nuevo tatuaje?
RECUERDA: el posterior cuidado del tatuaje es extremadamente importante, y una loción de buena calidad es vital para garantizar una cicatrización rápida y adecuada de tu nuevo tatuaje.
La mejor loción para tatuajes que he utilizado es un producto vegano llamado Hustle Butter. Funciona increíblemente bien durante el proceso de cicatrización, no solo mantiene tu tatuaje bien hidratado, sino que también es muy bueno para calmar ese molesto picor e irritación.
Muchos otros usuarios de este producto también han informado que al usarlo desde el inicio del proceso de cicatrización, parece disminuir los tiempos de curación y reducir considerablemente las costras duras.
Resumen
La duración del sangrado de un tatuaje varía de persona a persona, pero generalmente sangrará durante uno o dos días una vez salgas del establecimiento de tatuajes.
Si sospechas que hay algún problema con la cicatrización de tu tatuaje, habla con tu artista o un médico para asegurarte de que no haya nada que cause que tu tatuaje sangre más de lo debido.